Adolescentes con obesidad: como ayudar
Rechazo de sus pares, aislamiento y distorsion de la imagen corporal, son solo algunas de las consecuencias que el sobrepeso y la obesidad pueden causar en niños, niñas y adolescentes (NNyA). “Tambien tienen un riesgo elevado de padecer hiperinsulinemia, hipertension, dislipemias y de presentar obesidad en la vida adulta, con toda su gama de complicaciones”, explica la medica especialista en nutricion Virginia Busnelli. “Los chicos y chicas con sobrepeso tambien pueden desarrollar un trastorno alimentario en la busqueda de una solucion que nunca parece llegar o que les cuesta lograr”, agrega.
Segun la segunda Encuesta Nacional de Nutricion y Salud, cuyos datos se conocieron el año pasado, el 41,1 % de los NNyA argentinos de entre 5 y 17 años presentan algun grado de sobrepeso u obesidad. El diagnostico se hace mediante el Índice de Masa Corporal (IMC), que se calcula con el peso (en kilogramos) dividido por la estatura (en metros) elevada al cuadrado.
“Los adolescentes cuyo IMC se encuentra en el 5% superior para su edad y sexo se consideran pacientes con obesidad. Estar en el 5% superior significa que su IMC es superior al del 95% de sus pares (en el percentil 95 o por encima de este)”, explica Busnelli.
Segun la licenciada Marisa Russomando, psicologa especialista en crianza y familia, hubo en los ultimos años en aumento en las consultas psicoterapeuticas de niños con obesidad.
“Estos trastornos eran bien tipicos de la adolescencia hace unos años entre los pacientes que llegaban a la consulta, pero desde hace un tiempo la problematica se traslado a la infancia. Y sigue siendo una tendencia en niñas”, dice la especialista. “Cuando un adolescente tiene sobrepeso o cualquier otro tipo de trastorno de la alimentacion, debe trabajar y ajustar su vinculo con la comida”, agrega.
Russomando en tanto, advierte que asi como no ayuda el entorno, la actitud de algunos padres, tampoco lo hace. “Bajo la responsabilidad de papa y mama, los niños, las niñas y los adolescentes crecen enmarcados en la satisfaccion inmediata”, explica. “Quiero algo y lo tengo en el momento, voy a hacer algo y me dicen que no se puede, pero inmediatamente me lo permiten. Esto marca una tendencia de no poder esperar, de no trabajar para lograr esa satisfaccion y la comida genera esa misma sensacion. Al comer algo rico se logra esa satisfaccion inmediata, pero asi como llega se va, instando a volver a comer”.
¿Puede un adolescente hacer dieta?
En cuanto a los tratamientos aconsejados para el tratamiento del sobrepeso en la adolescencia, las especialistas consultadas coinciden en afirmar que los chicos no deben hacer dietas ni seguir planes alimentarios estrictos.
“Los niños y los adolescentes estan creciendo y desarrollandose. Por eso, ponerlos a dieta y quitarles la energia y los nutrientes que necesitan es muy riesgoso y hasta puede traerles consecuencias a futuro”, considera la licenciada Beltrami. “Y por otro lado, someterlos a esta cultura dietante desde tan temprana edad hace que desarrollen conductas inapropiadas respecto a la forma en que se relacionan con la comida y con su cuerpo, y esto mismo, sumado a otros detonantes, puede llegar a contribuir al desarrollo de un trastorno alimentario”.
Segun Busnelli, el objetivo primordial del tratamiento de la obesidad en la adolescencia en no generar restricciones alimentarias ni exigencias. “El tratamiento oportuno para esta etapa es promover cambios pequeños, graduales pero permanentes y sustentables en el estilo de vida que incluyan una alimentacion sana, variada, completa y un patron de actividad fisica regular para toda la familia. Salvo en casos de peligrosa evolucion o indicaciones precisas, se recomienda no hacer dietas restrictivas en los niños”.
Consejos para la alimentacion de chicos y adolescentes con sobrepeso u obesidad:
✔Incorporar mas de 5 porciones de frutas y verduras diarias.
✔Eliminar las bebidas azucaradas.
✔Alentar el consumo de agua.
✔No saltear el desayuno.
✔Comer junto a la familia y promover la integracion a la mesa.
✔Minimizar las comidas fuera del hogar.
✔Involucrar a toda la familia en los cambios de habitos.
✔Disminuir las horas frente a las pantallas.
✔Eliminar el televisor de la habitacion.
✔Favorecer el juego al aire libre y la vida deportiva grupal no competitiva.
✔Fomentar las caminatas.
✔Recomendar a los padres establecer gradualmente los horarios de comida favoreciendo la “comensalidad”.
Cuando se necesita apoyo terapeutico
En mas de una ocasion, los chicos pueden necesitar apoyo terapeutico para revertir su estado de sobrepeso u obesidad.
“Los problemas de exceso de peso en adolescentes pueden responder a multiples factores y habra que analizar cada caso en su singularidad”, analiza la licenciada Torti.
“La adolescencia es un tiempo de la vida que involucra grandes cambios, los cuales exigen un trabajo psiquico de gran complejidad con la consiguiente emergencia de emociones. El encuentro con un nuevo cuerpo sexuado, la asuncion de una nueva imagen, el pasaje del mundo intrafamiliar a lo extrafamiliar (de los padres a los pares ) y la resignificacion (dar un nuevo sentido) de lo vivido anteriormente, son algunas de las acciones que todo adolescente debe afrontar. En algunas ocasiones, todas pueden llevarse a cabo sin mayores problemas, y en otras pueden ocasionar mayor monto de sufrimiento y malestar”, agrega.
Segun la psicologa, cuando los chicos no saben o no pueden identificar lo que sienten y les cuesta poner en palabras el malestar que los atraviesa, entonces el acompañamiento terapeutico se vuelve muy importante. “La puesta en marcha del dispositivo terapeutico apuntara, mediante la escucha y la emergencia de la palabra, a tratar la causa del problema del exceso de peso en el adolescente, facilitando la emergencia de otras vias de tramitacion”, completa la psicologa.
Segun Russomando, el trabajo terapeutico tiene que estar enfocado en volver a iniciar un vinculo mas sano con la comida. “El abordaje es familiar, porque en general, cuando aparece esta problematica en los adolescentes, existe una modalidad vincular instalada en la familia”, dice. “Se necesitan padres y madres comprometidos porque habra que cambiar habitos y comprender todas las razones de por que se deben implementar los cambios”.