Cuando la persona es devorada por el personaje: maneras de gestionar la fama
Los casos en los que la fama ha sido mal digerida por sus protagonistas darian para escribir una enciclopedia exclusiva del tema: desde Marilyn Monroe a Lindsay Lohan, pasando por Macaulay Culkin, Charlie Sheen o los tragicos finales de Heath Ledger o Amy Winehouse.
Por otro lado, a medida que aumenta la fama es posible que tambien lo haga el aislamiento, la tristeza y la soledad. Para quien vive la fama es facil sucumbir al canto de sirenas de sus seguidores, aparentemente todo el mundo le ama y busca estar cerca de el o ella pero la realidad es que muchas personas populares acaban preguntandose si esto ocurre por como son en realidad, porque adoran al personaje que han creado o solo por el glamour y el dinero que les rodea.
Aprender a no tomar las opiniones y criticas de una forma personal. Quizas este sea el punto mas complicado ya que la fama provoca, entre otras cosas, la sobreexposicion a todo tipo de comentarios, tanto positivos como negativos. Conviene aceptar que las criticas forman parte de este juego, relativizarlas y nunca interiorizarlas. Tambien es fundamental entender que uno no se tiene que convertir en todo lo que su publico espera de el. Hay que intentar cumplir nuestras propias expectativas, nunca las de los demas por mucho que nos admiren.