Incontinencia urinaria: deportes y actividades que elevan el riesgo
Los especialistas aconsejan tambien los ejercicios de Kegel, que consisten en contracciones de los musculos del suelo pelvico destinadas a fortalecer y tonificar esta musculatura, y la terapia biofeedback, en la cual a traves de sondas electricas ayudan a coger fuerza muscular y conciencia de este suelo pelvico, asi como la conciencia corporal y postural integrativa.
¿Y como puede ser que a una persona activa que practica alguna actividad de manera asidua se le escapen precisamente gotas de orina? “Los saltos provocan presion en el perineo”, insiste Butinyà.
Deportes para tener que aguantarse
El running, el basquet, la equitacion y el aerobic pueden agravar la incontinencia urinaria ya que son movimientos de riesgo para el suelo pelvico.
Running, basquet, equitacion y aerobica son deportes asociados a la aparicion de incontinencia uinaria.
Foto Juano Tesone
Sonia Marcos, fisioterapeuta y osteopata especializada en uroginecologia y obstetricia, aclara que “el suelo pelvico esta formado por un conjunto de musculos que tienen una forma de hamaca y conjuntamente con los musculos abdominales, especialmente el musculo transverso del abdomen, hacen de faja natural. Si no se trabaja esta musculatura para que tenga un tono mas adecuado, a la larga se convertiria en una incontinencia mas grave”.
Ademas, Marcos señala que hay personas con una vida “hiperpresiva”. Es decir, “si la persona hace muchos esfuerzos fisicos en el trabajo y le gusta ir a correr, el impacto aumenta la presion abdominal. Asi se va debilitando esa hamaca de musculos perineales que pierden la funcion de mantener las visceras en su lugar y, a la larga, es facil que pueda producirse incontinencia urinaria, inicialmente gota a gota”.
El objetivo, segun esta fisioterapeuta, es conseguir “una buena faja abdominal y asegurarnos de tener un buen tono muscular perineal antes de practicar deportes de impacto. Y prevenir con tratamiento, si es necesario, para no llegar a la incontinencia”.
Un trastorno silenciado e infradiagnosticado
La perdida de control de la vejiga, sin embargo, es todavia un trastorno silenciado e infradiagnosticado. Muchas mujeres reconocen tener perdidas de orina frecuentes, pero al ser de poca cantidad y al no afectar su calidad de vida no toman medidas, ni tampoco piden ayuda a su medico.
Esta problematica afecta mas a ellas que a ellos, segun Calais-Germain, porque hay una diferencia entre el suelo pelvico de ambos: el de la mujer es mas ancho “porque su pelvis es mas amplia y ademas tiene un orificio, la vagina; el del hombre, en cambio, no tiene este problema, esta entero”, describe.
Los ejercicios de Kegel, para fortalecer el suelo pelvico, son ideales para frenar el trastorno.
Segun la pedagoga, especializada en anatomia, integracion y movimiento, Nuria Vives, lo importante es “tomar conciencia y cuidar la zona, lo que significa conocerla, entender sus funciones, ir descubriendo e incorporando estrategias para tenerla como aliada nuestra y poder integrarla en nuestra vida cotidiana”.
La solucion pasa, dice Vives, por “educacion y prevencion” en todas las etapas del ciclo vital de la mujer.
“Falta educacion, reconocimiento, ver que esta zona es tan bonita como puede ser otra zona del cuerpo. Frecuentemente confundimos la zona del perine con los gluteos, los abdominales, los aductores… con musculos perifericos. Es una zona culturalmente invisibilizada y, cuando no hay palabras y no la nombramos, no existe”, comenta. Pese a ello, considera que “poco a poco se esta perdiendo el miedo a nombrarla, a poner nombre a nuestros genitales externos, a los musculos del perine y tambien a las sensaciones para ir poco a poco reconociendolas, sentir si alli nos sentimos contraidas o con falta de tono”.
Alimentacion anti-incontinencia
Pero no solo por hay que cuidarse por fuera. Hacerlo por dentro tambien ayuda a prevenir o mejorar la incontinencia urinaria. Mantener una dieta equilibrada, cuidar la hidratacion y reducir la ingesta de alimentos que sean mas diureticos es otra buena manera de conseguirlo. Entre los alimentos y bebidas que irritan la vejiga, en primer lugar tenemos el cafe y el te –incluidos los que no tienen cafeina– y las bebidas carbonatadas en general. Otros son el cacao, el alcohol, los citricos, el picante y el tomate.
“En estos casos lo mejor es eliminarlos de la dieta entre 8 y 10 dias y, si la incontinencia urinaria mejora, reintroducirlos de uno en uno para identificar el o los alimentos que la empeoran”, comenta la doctora Anna Pla, experta en nutricion y homeopata. Segun ella, los alimentos que tienen buena fama son los arandanos rojos, los guisantes y la palta. “En general, una dieta con proteinas de calidad y abundancia de vegetales para no sufrir deficit de vitaminas ni oligoelementos, nos ayudara a asegurar la calidad de los tejidos de la vejiga (muscular y mucosa)”, define.
Otros buenos consejos incluyen: “beber una cantidad suficiente de liquidos –tanto la carencia (orina mas concentrada) como el exceso de ellos irritan la vejiga–; la actividad fisica moderada porque tonifica el suelo pelvico y por lo tanto es de ayuda, asi como mantener un peso adecuado”, comenta Pla.
“Controlar el estreñimiento tambien ayuda, al disminuir la tension para evacuar”, precisa esta doctora. Por contra, el tabaco irrita la vejiga y “es un factor de riesgo para el cancer de vejiga”, advierte.
El tomar es uno de los alimentos que irritan la vejiga y contribuyen a la incontinencia.
Por su parte, existen algunos medicamentos que tambien pueden contribuir a desencadenar o agravar la incontinencia, entre ellos, los sedantes, antidepresivos, diureticos, relajantes musculares, antihistaminicos y medicamentos para el corazon y para la hipertension arterial. “Si se toma algo de esto y se cree que puede tener relacion hay que consultar al medico”, destaca Pla.
Con todo, los expertos aseguran que si se consulta al medico con los primeros sintomas, el trastorno puede ser tratado y se evita su evolucion. Es corregible y transitorio. Pero si se deja pasar, con el tiempo empeora y su tratamiento puede ser mas complicado a medida que aumenta el grado de incontinencia.
Fuente: Barbara Jule para La Vanguardia