La peligrosa enfermedad que empieza con un dolor en la espalda
El cáncer de páncreas es, según la Sociedad Española de Oncología Médica, el octavo más frecuente en nuestro país, pero debido a su alta letalidad, supone la tercera causa de muerte por cáncer, siendo el responsable del 7% del total.
Cada año se diagnostican en España 8.697 nuevos casos, con una mortalidad estimada en el año 2021 de 7.568 fallecimientos, según datos manejados por la SEOM.
Por eso, como en otros tipos de cáncer, es importante la detección precoz y para ello se debe estar atento a los primeros síntomas, que incluyen dolor abdominal y de espalda, pérdida de peso inexplicable e ictericia.
El páncreas es una glándula alargada ubicada detrás del estómago y debajo del hígado. Tiene dos funciones principales: gotear enzimas digestivas en el intestino para ayudar a descomponer los alimentos y liberar las hormonas insulina y glucagón para regular el azúcar en la sangre.
El cáncer de páncreas ocurre cuando se forman células malignas (cancerosas) en los tejidos del páncreas. La tasa de supervivencia promedio en toda Europa es solo del 5%, y solo el 1% vive diez años o más después del diagnóstico.
Una de motivos por los que esta enfermedad tiene un pronóstico tan malo es que el cáncer de páncreas tiende a diagnosticarse demasiado tarde. Solo ocho de cada 100 personas pueden someterse a una cirugía para extirpar el páncreas, lo que les brindaría la mejor posibilidad de curación.
Estos son los principales síntomas:
- Dolor abdominal.
- Dolor de espalda.
- Pérdida de peso inexplicable.
- Indigestión.
- Pérdida de apetito.
- Cambios en los hábitos intestinales: esto incluye esteatorrea (heces pálidas y malolientes que pueden flotar), diarrea (heces acuosas sueltas) o estreñimiento.
- Ictericia: Los signos más comunes de ictericia son que su piel se torne amarilla. También causa orina oscura, heces pálidas y picazón en la piel.
- Dificultad para tragar: algunas personas pueden tener dificultades para tragar los alimentos, o pueden toser o ahogarse cuando comen, tragar la comida o sentir que la comida se atasca en la garganta.
- Diabetes recién diagnosticada: el páncreas produce insulina, que ayuda a controlar la cantidad de azúcar en la sangre. El cáncer puede impedir que funcione correctamente, lo que significa que podría no producir suficiente insulina y causar diabetes.
- Cansancio extremo (fatiga).
- Sentirse inusualmente lleno después de la comida.
- Coágulos de sangre en una vena.